El carvado de sellos es una técnica sencilla, barata y asequible de grabado. Muy parecido al grabado en linóleo o a la xilografía, pero mas sencilla, ya que al trabajar sobre un material muy blando la talla es más cómoda. Hay que ser muy cuidadoso para no tallar las partes no deseadas, ya que cualquier modificación respecto al modelo alterará el resultado.
Necesitaremos:
Plancha de vinilo, o en su defecto goma de borrar de las grandes que duran toda la primaria y parte de secundaria, pero nueva, recomiendo en blanco para ver bien el dibujo.
Hay diferentes marcas y tamaños de planchas de vinilo. La goma es la solución mas económica, pero probablemente no la duradera. La plancha se comercializa en varios tamaños, si la compráis entre varios se puede cortar en partes iguales y compartír goma y gastos.
Sobre el vinilo, o goma, se talla la imagen con las gubia, que es un mango con una punta cortante e intercambiable. Elegimos una u otra en función de las características del dibujo.
La almohadilla de tinta del color que queramos.
La parte más importante será la elección del motivo, en nuestro caso como es un autorretrato necesitamos una foto de primer plano que tenga la luz adecuada para el trabajo. Debe tener luz lateral para crear sombra en uno de los lados de la cara y tener una buena resolución para evitar que se vean píxeles. Voy a hacer paso a paso el sello a partir de una foto de vuestro profesor Bernardo, que se ha prestado mas o menos voluntario al experimento.
1.-Seleccionamos esta foto por que tiene una zona de la cara mas iluminada que la otra.
2.-La foto debe ser digital para poder editarla luego en Photoshop o Gimp. En este enlace del blog podéis ve el proceso completo para convertir la imagen en otra en tintas planas, blanco y negro.
3.-Podemos prescindir de detalles innecesarios para que la talla sea mas cómoda y sencilla.
Una vez que hemos editado la imagen como deseamos podemos reducirla al tamaño de la plancha de la goma o vinilo e imprimirla. Si queremos gastar menos tinta podemos rebajar el tono de negro.
4.- Una vez que tenemos la foto impresa al tamaño deseado tenemos que calcar en la goma, hay varias formas pero esta no falla.
Calcamos la silueta evitando detalles innecesarios. También podemos marcar toda la supercie que queremos reservar, lo que queda en blanco es lo que tenemos que rebajar.
5.- Fijamos el papel con cinta adhesiva a la goma al revés, es decir con la cara dibujada pegando a la goma y presionamos por detrás con un lápiz. El dibujo inicial se traspasará a la superficie de la goma pero al revés de forma que al imprimirlo quedará de nuevo al derecho.
Si no queda muy claro el proceso lo podéis ver paso a paso en aquí.
6.- Ahora es el momento mas delicado, la talla con la gubia. Un error en esta fase nos obligará a empezar de nuevo en otra superficie nueva. Si todo va bien nos quedará algo así. Aunque no se vea claro y pensemos que ha salido fatal es necesario hacer una prueba de estado, es decir, entintar e imprimir sobre papel.
Podemos pegar con cola de contacto la goma a un taco de madera del mismo tamaño, así será más fácil imprimir y el sello estará reforzado.
Si al hacer la prueba vemos alguna línea extraña podemos retocar con cuidado para eliminarla. En este caso se ha eliminado la linea que quedó sobre el labio superior.
7.- Llegados a este punto tendremos un sello con nuestra cara para imprimir donde mas os guste, eso si con responsabilidad.
Mirad el uso creativo que ha dado Bernardo.
Ahora, ilusión, voluntad y premura en el trabajo. Sin prisa pero sin pausa. Si trabajáis como en el primer trimestre tenéis el éxito asegurado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario